¿Cómo evitar la sobreprotección?

Las prácticas educativas de los padres afectan significativamente el desarrollo socioemocional de los hijos, ya que, con su ejemplo, estos se convierten en modelos de comportamiento. Así lo asegura Sergio Pareja Jiménez, Consejero de nuestro Colegio, con quien identificamos las principales características de un estilo de crianza, como el sobreprotector, y los resultados que se pueden conseguir cuando se evita. 

Una pauta para contrarrestar una actitud parental sobreprotectora es reflexionar sobre la siguiente premisa: “Todo aquello que hagamos por los hijos, cuando ellos pueden hacerlo por sus propios medios, en lugar de ayudarlos, los debilita”, concluye Sergio. 

Se caracteriza por un esfuerzo excesivo de evitarles cualquier tipo de sufrimiento a los niños, buscar solución a todos sus problemas y alejar-les de cualquier tipo de riesgo. Ante esto, los padres no advierten que se afecta el desarrollo de la independencia, la autonomía y se les generan miedos e inseguridades. 

Un niño debe explorar su entorno, aprender de las equivocaciones, tomar iniciativas, hacerse una idea personal del mundo en que le tocó vivir, descubrir de manera realista sus fortalezas y limitaciones. “Cuando sus padres los cuidan en exceso, se inhibe el desarrollo de habilidades y se les trasmite inconscientemente que el mundo es demasiado peligroso y difícil para que ellos puedan enfrentarlo solos”, puntualiza nuestro Consejero. 

Al permitirle a los hijos hacerse responsables de las consecuencias de sus actos y que ellos sean dueños de sus logros, van desarrollando un sentimiento de competencia que se denomina autoeficacia, el cual les permite fortalecer su seguridad personal y tener una predisposición positiva para enfrentar retos y exigencias académicas o en otros ámbitos.