En la niñez es importante aprender que no todo lo que se quiere se tiene inmediatamente. “Es básico que los pequeños entiendan la diferencia entre necesitar, querer y desear”, explica Laura Posada, Consejera de nuestro Colegio. “Necesitar tiene que ver con suplir las necesidades básicas, querer está relacionado con la inmediatez y desear es complejo, pues es algo más abstracto”, agrega. No todo lo que se desea se obtiene inmediatamente y es por esto que los niños deben aprender a desear. Estas son algunas recomendaciones para tener en cuenta:
El suyo es un mundo de fantasía y omnipotencia, para ellos todo se puede. En este punto, la labor de los padres es hacerles entender que hay diferencias grandes entre lo que se quiere y lo que se necesita: puedo querer un celular sin necesitarlo; en este caso, es vital mostrarles que nuestra vida no depende de este tipo de dispositivos.
Muchas veces los papás miden su compromiso con la paternidad en los regalos que dan; sin embargo, es importante que los niños entiendan que no todo lo que piden les será entregado. Para enseñar con el ejemplo, un momento para mostrar que existen límites es durante el mercado: hay cosas que queremos comprar, pero que en algunas oportunidades no podemos llevar, eso hay que hacérselo evidente a los más pequeños. Una buena práctica es hacer una reunión familiar para planear las compras antes de cada mercado.
Es bueno establecer compromisos para que los niños se ganen las cosas. La mesada, por ejemplo, deberá ganarse con la realización de ciertas actividades en la casa. Sin embargo, hay que tener cuidado pues los regalos no pueden estar sujetos ni al buen comportamiento ni al rendimiento académico. Es importante como padres diferenciar entre dar una recompensa por los deberes hechos y hacer un regalo. Es decir, el regalo nace del corazón, sin embargo, debe ser concertado entre ambos padres de manera sensata
Por lo que cada vez que los niños pidan, antes de decir “no”, la primera pregunta que hay que hacerles es si realmente necesitan lo que están pidiendo. Podemos mirar con ellos la funcionalidad de lo que desean y concertar un cambio por un objeto igual de deseable, pero con un uso más práctico.
Hay que inculcarles que en el dar hay un nivel de satisfacción tan alto como en el recibir. Los regalos entregan un mensaje de valoración y es por ello que saber dar un obsequio ayuda a desarrollar cualidades como la empatía. Saber regalar no es solo generosidad, es aprender a relacionarse con los demás.