Admitimos con integralidad

Cuando un nuevo estudiante ingresa al Colegio Alemán Medellín, no lo hace solo: llega una familia que lo acompañará en un camino de 14 años. Por eso, la decisión de ingresar a nuestra institución no se toma a la ligera: por un lado, los padres deben estar convencidos de que este es el mejor lugar para que sus hijos crezcan y se desarrollen y, por otro, debemos conocer muy bien a los aspirantes, su familia y su entorno, para facilitar su adaptación al modelo pedagógico y propuesta de valor. 

El proceso de admisión se realiza a consciencia y, aunque actividades como la visita guiada en las instalaciones del Colegio pueden anticiparse, con el niño aspirante inicia cuando este ya ha cumplido los 2 años. Estamos convencidos de que este es el tiempo prudente para que una familia, independientemente de su conformación, haya interactuado lo suficiente con el pequeño para entender muy bien sus prioridades, sus gustos, su personalidad y su comportamiento. Sabemos, además, que durante este tiempo no solo los niños están listos, sino que la familia ha logrado consolidarse, entender dinámicas y relaciones entre padres e hijos que serán fundamentales para tiempos venideros.  

Tenemos la certeza de que la elección de un colegio es un paso trascendental y, por ello, queremos ayudar a encontrar una respuesta para una de las preguntas que se hacen los padres: ¿mi hijo será feliz en este Colegio? Sin embargo, consideramos que una decisión como esta debe involucrar a toda la familia, por lo que creemos que la tranquilidad y la felicidad no pueden ser solo para el estudiante, sino para todo su núcleo familiar.

Hemos diseñado un proceso de admisiones que hoy es referente para otras instituciones de la ciudad y del país. Ha sido pensado cuidadosamente, para que las familias se hagan una idea de cómo es el día a día en nuestro campus, conozcan la metodología de enseñanza y entiendan que, al elegir el Colegio Alemán Medellín, escogen un lugar con énfasis en el aprendizaje de tres leguas (español, alemán e inglés) y que, más allá de un proceso académico, los niños y jóvenes vivirán una experiencia intercultural.   

Es el momento para que una familia empiece a imaginar un futuro con sus hijos. Todo comienza con una visita a nuestras instalaciones y los guías son nuestros estudiantes, para tener un contacto directo con quienes mejor pueden dar testimonio de su vivencia, de su pensamiento crítico y su formación como ciudadanos del mundo. Interesa, además, conocer la historia de cada uno de los miembros de las familias aspirantes y cómo esta confluye con lo que nuestro Colegio propone, en términos de filosofía institucional; es por esto por lo que invitamos a los padres a una entrevista y a una jornada lúdica con su hijo. 

Somos conscientes de que debe ser en doble vía; por eso, propiciamos escenarios para la relación con los profesores, personal directivo y administrativo, para que se viva el ambiente multicultural, de tal manera que sean las familias las que confirmen que nuestra promesa de valor es real.  Así mismo, visitamos los centros infantiles, para conocer, en un ambiente natural, el proceso que han tenido nuestros aspirantes y sus familias.  

Es por eso por lo que entendemos el nuestro, como un proceso de admisiones integral, en el que no solo recibimos aspirantes, sino que le damos la bienvenida a todo el universo que hay detrás suyo, que incluye a sus padres, a su familia y al entorno en el que interactúan. Resulta esencial, entonces, que las familias comprendan nuestro modelo y que este se alinee con su proyecto de vida.